Pero muy a menudo, es evidente, los valores de las mujeres difieren de los que ha implantado el otro sexo; es natural que así sea. No obstante, son los valores masculinos los que prevalecen. Hablando crudamente, el fútbol y el deporte son "importantes"; la adoración de la moda, la compra de vestidos "triviales".
Virginia Woolf, "Una habitación propia". Barcelona, Seix-Barral, 1989; pág. 101.
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2 comentarios:
Eso: los recortables una mariconada. Los cromos de futbolistas una afición.
Ni caso.
Te he echado de menos. Espero que tengas una buena escusa en forma de libro.
Un abrazo.
Gracias, Uno.
Pues sí, entre otras cosas he estado corrigiendo las pruebas de mi segunda novela, que aparecerá en otoño. Y sigo escribiendo, por supuesto.
Abrazos.
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