jueves, 21 de enero de 2010

Si el corazón pensara


" (...) desarrolló una intensa afición al fútbol, un juego al que de todos modos era prácticamente obligatorio entregarse en aquella extraña pedagogía de los salesianos; tan extraña que había acuñado este singular aforismo: niño que no juega, está malo o es malo. Así fue como el joven Domínguez alcanzó grandes habilidades en el manejo del balón, corriendo por la banda derecha, con tal de escapar del alevoso clérigo. También, dicha sea la verdad completa, porque su padre le había infundido una temprana pasión por el balompié, a través del culto al que siempre sería el equipo de todos sus desvelos, el Sevilla Club de Fútbol".


Antonio Rodríguez Almodóvar, "Si el corazón pensara".Madrid, Alianza Editorial, 2009; pág. 23.

sábado, 9 de enero de 2010

El patrón de los deportistas



Para que luego digas que el deporte no es "bueno": ahora quieren hacer al papa Woytila patrón de los deportistas. El papa polaco todavía no ha llegado a santo (el "abogado del diablo" estará haciendo bien su oficio) pero al tiempo. Y ese patronazgo lo apoya nada menos que el hasta hace poco prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos (es decir, la institución encargada de promocionar a los santos). Según el susodicho (de nombre José Saraiva Martins) Juan Pablo II no sólo practicaba el deporte sino que "entendía sus valores". Hasta tal punto, que cuando llegó al Vaticano mandó construir una piscina y un gimnasio. En fin, otros papas patrocinaban obras de arte. Como el non sancto Julio II que le encargó pintar el techo de la Capilla Sixtina a un tal Miguel Ángel....

sábado, 2 de enero de 2010

Buenos deseos

Por qué, entre los buenos deseos que se formulan en Año Nuevo, no está nunca la desaparición de la liga de fútbol profesional y sus mafiantes.

Nota: mafiantes: neologismo compuesto de "mafiosos" y "mangantes".