
¿Cuándo se desplazará un presidente del gobierno español a Roma sólo para comprobar el colorido exacto de los frescos de Rafael, o la morbidez de la carne de mármol de la Paulina Borghese canoviana o la exquisita armonía de la cúpula del Panteón? En lo que dura un partido de fútbol y sus exasperante prolegómenos daría tiempo a saciarse de tanta belleza en Roma...Como dice el refrán: Dios le da garbanzos...
1 comentario:
Pero cómo puede ser tan frívolo un presidente del gobierno en medio de tal crisis...o precisamente por eso...
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