viernes, 23 de febrero de 2007

no sport

Antideportistas del mundo ¡uníos! Ya está bien de tanta matraca de si el deporte es bueno, los valores del deporte, mejor deporte que consorte.... y otras zarandajas. El deporte, globalmente considerado, en sí, ontológicamente, es una caca de la vaca. Y nadie se atreve a levantarle la voz. Camareros, intelectuales, agricultores, jubilados, estudiantes, amas de casa, peregrinos, dilettantes, deportistas, ex-deportistas....decid ¡no! Odio el deporte: atrévete a decirlo. Cuando a Churchill ya octogenario le preguntaron cómo había llegado a esa edad, fumando como una siderúrgica y pegándose sus lingotazos de alcohol también, respondió: ¡Muy sencillo! NO SPORT!

5 comentarios:

Pepelu dijo...

yo siempre he pensao así, y lo he dicho muchas veces, el deporte porfesional es una gran mentira, y no es salud,sino todo lo contrario, haciendo sino negocio, a base de castigar el cuerpo de forma desproporcionada y salvaje; y olvidandose del deporte de verdad, el amateur, poco dotado de infraestructuras y que si puede ser sano.

Me pareceuna idea estupenda, mis felictaciones

Anónimo dijo...

Evidente tu razonamiento, tan evidente que uno, cansado de verlo, no cae en ello. Pero no por eso menos cargado de razon.

Estoy de acuerdo en todo ello, pero sugiero...hasta que punto ese mismo razonamiento no es trasladable al resto de nuestras "actividades" ??

La música, la pintura, la literatura...

Es mejor músico, mejor fotografo, mejor pintor...el anónimo que no recibe el favor de los medios, o el artista anónimo que en silencio, para su exclusivo consumo o el de un pequeño circulo de amigos, recrea sus obras?

Al final, si uno sigue esa espiral de razonamientos confluirá en que hay mas mal en esa sociedad de la informacion, donde por intereses económicos, se alaba, se adula, se magnifica la obra y milagros de "fulanito de tal" y, si el tal fulanito se lo sabe montar...ya está subido al carro de la fama y a partir de ahí mas que deportista, pintor o músico se convierte en un "mass media"...

Creo que la reflexión debería de ir mas por ese camino. No es malo el deporte, y mira que soy practicante del "sillo bol"...sino el uso que los medios de comunicacion hacen de ese "heroe" con cuya leyenda, conquistas, records...alimenta a la plebe. "Panis et cirquensis" o algo así. que decian los romanos.

En cualquier caso me ha gustado mucho tu forma de contarlo...

Amjorreto.

Anónimo dijo...

lo del cria fama y acuestate a dormir se puede observar en los Perez Reverte y compañia que furulan por este país... y en cuestiones de fotografia... y de grandes maestros... pues más o menos lo mismo.. en: http://blogs.elpais.com/fijaciones/

Anónimo dijo...

Creo deberías diferenciar entre el deporte y esa otra actividad llamada "profesional" o de "élite" (será económicamente hablando). Lo primero si es deporte, lo segundo no es más que una más de las consecuencias de esta PUñetera manera de entender la vida. Si no existieran tan disparatados intereses económicos evidentemente no habría necesidad de diferenciar sexos en el ¿deporte?.Ánimo, has entrado en un campo de juego espinoso, muy espinoso; siento vergüenza de constatar que cualquier majadero que sabe darle patadas a un balón gana cientos de miles de euros al año y una persona que se ha cultivado, por ejemplo en el campo de la invetigación cientifica tenga que estar haciendo muchos números, para llegar a final de mes. ES EL MUNDO AL REVES.

asiole dijo...

El gusto por el deporte, tan extendido en nuestra sociedad, es para mí un arcano indescifrable. No consigo entender el placer que tanta gente encuentra en machacar sus músculos, torturar sus cuerpos, hacer aún más estresante su ya apretada agenda y quitarse tiempo para otras actividades mucho más placenteras, estimulantes o enriquecedoras. Ahora bien, sin entender el motivo, sin compartirlo, observo diariamente que hay gente que disfruta con tu odiado sport, que encuentra en él un camino para relacionarse con otros, divertirse, sentirse bien en su piel...En el instituto, me gusta ver la ilusión con que los chavales organizan sus liguillas, se ponen de acuerdo, juegan...sin duda, disfrutan mucho, y no seré yo quien los censure por ello.
Lo que sí detesto abiertamente son dos cosas: la obsesión paranoica de la sociedad con la forma física, asociada a un concepto represivo y yo diría que puritano de la salud y la belleza- si no machacas tu cuerpo en un gimnasio, si no practicas de forma esforzada algún deporte incurres en un delito de leso abandono y eres culpable de todo lo malo que pueda pasarte- y el bochornoso espectáculo del deporte profesional de masas, que, además de fomentar una agresividad y competitividad detestables, absorbe una atención mediática desmesurada- ¿alguien puede explicarme por qué hay información deportiva en todos los telediarios al mismo tiempo?- y, sobre todo, consume una cantidad ingente de recursos económicos, no sólo privados- ésa es la gran falacia- sino públicos, que estarían mucho mejor invertidos en otros campos. Algo huele a podrido en una sociedad donde los dimes y diretes de Lopera y compañía son día tras día las noticias más comentadas, y donde los grandes héroes, astronómicamente remunerados, son chicos que, no lo dudo, tienen una enorme habilidad chutando un balón y han tenido el chollo increíble de convertir su diversión de patio de colegio en ¡profesión!!Ver para creer!